LOS CAMINOS DE LA VIDA….NO SON LOS QUE YO (Y TODOS) CREIA NI SON LOS QUE IMAGINABA
(De los caminos de la vida de Vicentico)
La discusión sobre la movilidad de personas y vehículos en la ciudad de Quillota, ha sido un tema importante desde la implementación de los parquímetros por allá en la década de los ochenta, que fue gradualmente subiendo de tono por parte de una cada vez mayor cantidad de usuarios de vehículos, tanto particulares como de la locomoción colectiva.
La apertura de un tramo de Avenida Condell, apareció en el horizonte como una solución importante a mejorar el déficit de infraestructura vial de la ciudad y eventualmente como la solución a los problemas de conectividad que demandan los usuarios, pude señalar en el programa de radio nexo pulso 153 (durante el año 2005), que esta obra era “un falso espejismo de modernidad”, esto debido a que no es posible mejorar arterias para un flujo significativo que debe circular por un laberinto de calles y pasajes para incorporarse en un tramo a dicha avenida y luego retornar a otro laberinto de calles para llegar a destino.
Hoy a meses de los cambios realizados y el pleno funcionamiento de la arteria que fue rebautizada por muchos como avenida Lider, los mismos motivos y argumentos (para realizar los cambios) son utilizados para modificar movimientos al interior del damero central de la ciudad. Se coloca a la autoridad comunal frente a problemas que en definitiva no tienen solución - al menos por el momento – y que son de dos tipos:
El primero es de conectividad y tiene por objeto expropiar terrenos y casas para ensanchar y abrir nuevas vías, caso emblemático el de la calle Arauco. El segundo y más relevante es el de orden CULTURAL que tiene que ver con los comportamientos que asumimos al subirnos a un vehículo (particular o de la locomoción colectiva) cual es la de que nos interesa subirnos desde el punto donde estamos y que nos deje al lugar de destino, he ahí el éxito de los radio taxis.
Los esfuerzos que debe asumir la autoridad es el de liderar (evitar el cálculo político, ese es el esfuerzo que se solicita) junto a otros actores relevantes para la ciudad como los Concejales, Diputados, Gobernador, Líderes de opinión entre otros, el de entender que los recursos para dotar de una infraestructura vial es cuantiosa y es una población que no podría soportar una concesión de vías, por lo tanto debemos asumir que todas las acciones que se puedan emprender deben ser “lógicas” , prudentes y para ello debemos hacernos cargo de la primera pregunta: Donde queremos habitar?, en una ciudad como Santiago, como Buenos Aires, Londres, Beirut, cual?, a mí me gustaría decir que en una ciudad como Quillota, donde se puede aún caminar y ver el cerro Mayaca y oler en primavera algunos huertos, claro es una visión particular pero puede ser posible, una ciudad en la que los centros de distribución de productos (ferias, malls, galerías, kioscos, multitiendas, boticas y farmacias) sean lugares para satisfacer necesidades y no referentes culturales que nos agiten y compliquen en sus accesos y/o salidas.
Hay que superar muchas cosas para entender que una ciudad es un espacio para compartir, para rodearnos de afectos y una ciudad que tiene un eslogan como CIUDAD CONSTRUIDA CON CARIÑO debe mantener esa lógica, en consecuencia todos debemos cuidarla, encontrarla como el hermoso poema de Redolés ese del Bello barrio, (sugiero buscarla en www.mauricioredoles.cl) ese es el desafío, menos histeria y encontrar la ciudad que queremos y aquí podemos recibir todos los aportes, luego implementar señales al respecto, carteles y leyendas que hablen de esta nueva ciudad, del respeto que nos debemos, que todos los vehículos no caben al mismo tiempo por lo que se sugiere mantener la calma, que los peatones y ciclistas son privilegiados absolutamente, entre otras letras que deberían ser parte de nuestra nueva cultura.
Fernando Orellana
Desde al archipiélago de Quillota
